El cáncer de mama es el tipo de tumor más frecuente entre las mujeres españolas, suponiendo este un 30% del total de los cánceres diagnosticados en este colectivo.
Por suerte, su tasa de supervivencia ha aumentado significativamente en los últimos años gracias a la investigación y a los nuevos tratamientos que existen actualmente.
Muchos de estos tratamientos suelen ser quirúrgicos; biopsia, extirpación de ganglios linfáticos, mastectomía, reconstrucción de seno, etc.
Y aunque en primera instancia el tratamiento es fundamentalmente médico, después debe pasar a ser multidisciplinar para paliar las secuelas a nivel físico y psicológico que estos procedimientos conllevan.
En este blog vamos a hablar sobre las posibilidades fisioterapéuticas después de una intervención quirúrgica de cáncer de mama.
¿Cuáles son las secuelas de la intervención de un cáncer de mama?
Primero vamos a conocer cuales son las secuelas a nivel físico más frecuentes que nos podemos encontrar tras la intervención:
- Limitación articular del hombro del lado operado.
- Retracción de partes blandas (cicatrices y fibrosis).
- Contracturas musculares a nivel de cintura escapular.
- Dolor neuropático.
¿Cómo te podemos ayudar?
Desde Fisiother podemos intervenir de muchas formas:
- Terapia manual: para tratamiento de adherencias, cicatrices, contracturas musculares y alivio del dolor, combinado con la tecnología de INDIBA ACTIV.
- Movilizaciones: para restaurar la movilidad articular y ganar elasticidad.
- Drenaje linfático manual: para aliviar y prevenir el linfedema.
- Ejercicio terapéutico individualizado: para tratar las alteraciones posturales, la movilidad y la fuerza de las estructuras afectadas.
Es importante saber que el tratamiento precoz es fundamental para evitar futuras complicaciones (siempre siguiendo las indicaciones medicas).