Esta semana me ha ocurrido una cosa divertida en la consulta. Estaba hablando con una paciente (de las que llevan años con nosotros) y me preguntaba por un curso que había hecho hacía poco. La conversación fue algo así:
– ¿Qué tal te ha ido en el curso?
– Muy bien, hemos profundizado más en el tema y me ha gustado mucho.
– ¿Y de qué era?
– Dolores de cabeza, articulación de la mandíbula…
– Ah, pues yo tengo un ruido al abrir la boca y dolor de cabeza, ¿y eso lo tratáis los fisios?
– ¡Claro! ¿Cómo no me lo has dicho antes?
– No sabía que se podía hacer.
Eso me hizo pensar que, o me explico muy mal, o no dedicamos el suficiente tiempo a contar todo lo que sabemos hacer. Esto es para todos vosotros, pacientes, conocidos, amigos, e incluso familiares.
Empecemos por el principio, ¿qué es un fisioterapeuta?, qué difícil de contestar… nos ceñiremos a lo estrictamente académico. La fisioterapia es una carrera universitaria relativamente nueva para la cual hay que estudiar 4 años en la actualidad, es un grado. Acceder a tales estudios en las universidades públicas españolas supone tener una nota en el Bachillerato y la PAU muy alta, diría, si no han cambiado mucho las cosas, que casi tanto como la de Medicina, seguida de enfermería (el “top three” de la Sanidad). Os diré que el año que yo entré en Salamanca existían 2000 solicitudes para 50 plazas, así que os podéis imaginar el expediente que hay que tener.
La carrera es preciosa, qué os voy a contar… yo me enamoré desde el día uno de esta disciplina (esto lo dejaremos para otra entrada del blog porque como empiece, no me podéis parar). Poco a poco descubres todo lo que tienes que estudiar: anatomía, afecciones médico-quirúrgicas, psicosociología, fundamentos, valoración en fisioterapia, cinesiterapia, salud pública, fisiología, acondicionamiento físico, farmacología, fisioterapia y deporte, neurología, traumatología, desarrollo del niño…. Además de las muchas horas de prácticas en hospitales, mutuas, centros de día, geriátricos, asociaciones de esclerosis múltiple, parkinson… Y esto es sólo el principio.
Campos de estudio
Una vez que acabas la carrera, empiezas a trabajar (suerte que hemos tenido los que a los 21 empezamos a obtener una valiosísima experiencia) y decides en qué te quieres especializar. Porque sí, aquí reside uno de los mayores problemas/lastres que tenemos en esto de que el paciente se haga un lío… La fisioterapia es amplísima y cada fisioterapeuta elige uno o varios campos en los que se quiere especializar. Es normal que como paciente no sepas muy bien a quién acudir, porque casi cada uno somos diferentes (os explicaré más cosas sobre esto otro día). Existen muchísimos campos de especialización, pero los englobaré en bloques fáciles de entender:
-Traumatología
-Neurología
-Geriatría
-Deporte
-Pediatría
Prácticamente todas las patologías a tratar por un fisioterapeuta están englobadas en estos 5 bloques y todos los estudiamos en la carrera, por tanto, todos debemos saber tratar estos pacientes. Además, entras a formar parte del Colegio de Fisioterapeutas de tu Comunidad Autónoma.
Lo que suele ocurrir después es que la mayor parte de nosotros nos especializamos en algún campo concreto o estudiamos técnicas que se dirigen a algún tipo de patología o de paciente en particular. Ahí empezamos nuestros estudios de posgrado, que pueden ser Másteres Universitarios, Expertos Universitarios, Especialistas Universitarios, cursos de especialización, cursos acreditados por la Comisión de Formación Continuada del Sistema Nacional de Salud, cursos y seminarios de escuelas de posgrado con catalogación Nacional e Internacional…
Voy a hacer un inciso en esta parte. Existen muchos fisioterapeutas diferentes, todo depende del ámbito en el que te desenvuelvas, os diré que no hace exactamente lo mismo un fisioterapeuta que os trate con el mismo problema en la Seguridad Social, en una mutua o con un seguro privado o en una clínica completamente privada. Os explicaré por qué dentro de poco.
En estas especializaciones de las que os hablo, el fisioterapeuta profundiza mucho más en aquellos temas que le interesan y digamos que domina o sabe más que el recién titulado. Por poner un símil, la carrera es como la de medicina, se da de todo y luego hay que hacer el MIR y la especialidad para ser traumatólogo por ejemplo. Pues esta es nuestra especialidad para ser fisioterapeutas específicos de algún campo de lo que hemos hablado antes, es entonces cuando podemos empezar a hablar de fisioterapia avanzada. Conseguir llegar hasta aquí no es fácil, depende de tu tiempo, recursos económicos, interés… El médico ya cobra cuando se está especializando pero nosotros nos lo tenemos que costear y por eso existen bastantes diferencias entre compañeros de la misma profesión.
Formación continua
Si esto os parece poco, os diría que nunca, nunca, dejamos de estudiar, por lo menos los apasionados y enamorados de la fisioterapia -otro día os hablo de mi experiencia personal con la excelentísima susodicha-.
Véis entonces que este mu ndo es muy amplio, por eso os digo que prácticamente cualquier problema de salud que tengáis puede ser tratado y/o mejorado con fisioterapia porque las posibilidades son infinitas. Preguntadnos, los fisioterapeutas sensatos sabremos si podemos trataros o dónde tenemos que derivaros porque, que vosotros os curéis es bueno para vosotros y, no lo dudéis, para nosotros, en este caso, hablo por nosotros 3, Lucía, Mario, y yo, Esther.
Cada día que pasa me siento más orgullosa de ser fisioterapeuta y los que ya me conocéis, sabéis que no entiendo de límites para trataros, así que traedme lo más raro que se os ocurra porque lo que más me haga pensar, más me estimulará.
En las siguientes entradas os vamos a ir explicando en lo que nosotros más nos hemos ido especializando y en qué consisten las técnicas que os realizamos.
Después de todo esto espero que los que hayáis venido a trataros un tobillo o a hacer Pilates no penséis que sólo tratamos tobillos u os mandamos ejercicios de Pilates por favor, sabemos muchísimas cosas, pero muchas, os las contamos todos los días y os seguiremos explicando todo lo que haga falta.
Para todos los que no nos conozcáis, en Fisiother tenemos unos pilares de formación fortísimos, mucha sensibilidad manual encima, mucha confianza y pasión en lo que hacemos y sí, también una pizca de talento.
Esperamos vuestras inquietudes como agua de mayo.